De acuerdo a la
Real Academia de la Lengua Española (RAE) amor significa “sentimiento intenso del ser
humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro
y unión con otro ser/ Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae
y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da
energía para convivir, comunicarnos y crear.“ y enamorar quiere decir “Excitar
en alguien la pasión del amor“. Pero realmente alguna vez se han preguntado qué
es lo que le pasa a nuestro cuerpo cuando sentimos eso que todo mundo de una
forma u otra ha anhelado en su vida.
Para la gente
que alguna vez se ha enamorado, no sólo son sus ojos, su sonrisa, la forma en
la que hace que con su simple presencia haga que todo problema desparezca. Hay
procesos químico detrás de toda esa faramalla emocional. Imagínense que tan
cierto es esto que de acuerdo a la revista Nature, Larry Young (Centro Nacional
de Primatología de la Univ. De Emory) dice que descifrando los componentes
químicos del amor, se podría desarrolla fármacos que disminuyan o aumenten
nuestros sentimientos hacia los demás.
Cuando una
persona está enamorada segrega Oxitocina (molécula generada de forma natural
por hipotálamo) la cual es mejor conocida como la hormona del amor (ya que crea mejores vínculos sociales) a su
vez tu cerebro segrega dopamina (‘Stefan Brene del Instituto
Karolinska en Estocolmo afirma haber descubierto que la dopamina hace que
algunas personas sientan el bienestar y la energía del ejercicio). A su vez,
una persona que realiza ejercicio, segrega diferentes sustancias que se
asemejan en demasía y no distan de la actividad cerebral cuando una persona
está enamorada.
La beta
endorfina, por ejemplo es un elemento fundamental para crear las
sensaciones de placer en el cuerpo humano, llegándosele a conocer como
portadora de placer. Este químico es usual generarlo durante las actividades
físicas, por lo que los deportistas están siempre bien provistos de este
elemento, ya que el correr generan una elevación importante del nivel de
endorfinas y dopaminas. De esta apreciación surge la explicación del porqué en
los atletas el dolor físico es reemplazado por sensaciones de bienestar,
optimismo y júbilo que se prolongan aún después de concluir su entrenamiento.
Esto es causado porque el organismo produce la endorfina para contrarrestar el
dolor. Este neurotransmisor eleva los niveles de dopamina, reforzando de esta
forma las sensaciones placenteras del cuerpo.
Se ha
comprobado que cuando se realiza ejercicio se produce en nuestro cerebro
(concretamente en una estructura que se llama el núcleo accumbens) una serie de
sustancias a las que se les llamó endorfinas. Después del entrenamiento, los
valores de endorfinas se habían multiplicado, y se ha relacionado que en esa
sensación de "bien estar", "satisfacción" y de
"alegría " están relacionadas las endorfinas. Podríamos decir que ,
además de los buenos efectos que tiene el entrenamiento aeróbico sobre el
sistema cardiopulmonar, el sistema circulatorios y sobre el sistema inmune, el
ejercicio y en general el entrenamiento es muy recomendable para mantener
el equilibrio humoral y psíquico.
Dicho lo
anterior, una solución para los “males de amor“ no es sentarse a llorar y
comerse la despensa de la semana, o ir a un bar y consumir cantidades
exorbitantes de alcohol y cantar al son de un mariachi o Paquita la del barrio.
Lo que en realidad ayudaría a tu estado de ánimo, además de mejorar tu
apariencia física, es hacer ejercicio.
Fuentes
www.rae.es
http://www.muyinteresante.es/el-amor-es-pura-quimica
http://www.oxitocina.org/2010/06/¿que-es-la-oxitocina/
http://www.ain.cu/mujer/quimica.htm
http://www.junglefitnessoc.com/wp-content/uploads/2010/05/exercise-happiness-1-300x225.jpg
http://www.uantof.cl/semda/Original%20trabajo%20congresoMauricioHerrera.htm
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